Hoy en esta nueva entrada al blog de Aluminios Nou Stil, especialistas en ventanas de aluminio en Terrassa os queremos hablar de la condensación, un fenómeno que nos puede ocasionar problemas si no le prestamos demasiada atención. En las carpinterías de aluminio sin rotura de puente térmico se puede dar la circunstancia que debido a los factores climáticos externos y la humedad y la temperatura interna de la vivienda, la humedad se condense llegando a mojar el suelo y la pared, con las consecuencias tanto de desperfectos en las superficies como de la aparición de moho, altamente perjudicial para nuestra salud. Por eso, desde Aluminios Nou Stil, especialistas en ventanas de aluminio en Terrassa, queremos daros algunos consejos sobre cómo evitar la condensación en las ventanas y evitar males mayores. Pero antes de nada, veamos en qué consiste la condensación y cómo se forma.

¿Qué es la condensación?

La condensación es el cambio de estado de una substancia gaseosa a una substancia líquida, es decir, es el proceso contrario a la evaporación. Este fenómeno está estrechamente relacionado con la temperatura y la humedad relativa del aire. En las viviendas el aire del ambiente contiene vapor de agua (en mayor o menor cantidad) que al entrar en contacto con una superficie especialmente fría se condensa. Este efecto lo vemos muy bien cuando salimos de la ducha y vemos el espejo empañado por vapor de agua o cuando estamos cocinando caldo y las ventanas de la cocina se cubren de vapor fruto de la condensación. Así, cuando la temperatura es especialmente baja en el exterior y la humedad relativa en el interior es elevada, el aire al contacto con la ventana (que es la superficie más fría de la casa) se condensa formando gotas de agua en el vidrio y el marco de la ventana. Por eso es en invierno cuando se suele apreciar mejor este proceso, al mismo tiempo, los sistemas de calefacción o los humidificadores aumentan este efecto.

¿Cómo podemos evitarla?

El primer paso para evitar las humedades producidas por la condensación es ventilar de manera adecuada y eficaz nuestro hogar o lugar de trabajo. Ventilar las estancias permite renovar el aire e igualar la humedad del ambiente, de esta manera nos aseguraremos mantener la vivienda fresca y limpia. En invierno es aconsejable no excederse con la calefacción para que el contraste con el exterior no sea muy fuerte, y para reducir las emisiones de CO₂, tan perjudiciales para el medio ambiente. En segundo paso que recomendamos llevar a cabo desde Aluminios Nou Stil, especialistas en ventanas de aluminio en Terrassa es instalar unas buenas ventanas de aluminio con vidrios aislantes que nos aseguren un buen aislamiento térmico. Con este paso ahorraremos tanto en la factura del consumo energético como en energía en sí. Otra de las propuestas para evitar la condensación es el uso de deshumidificadores que absorban la humedad ambiental y eliminen el vapor de agua. Pero ojo, no debemos excedernos o podremos padecer de problemas de garganta y nariz, es necesario para la salud un cierto grado de humedad.